Luminoso atajo para la poesía

Cuanta más luz allá afuera
Cuanto más caliente es el día

                                                                                      F. Pessoa.

Bajó el cielo blanquizco
la intensidad de la luz
era inmensa
atónito vibrar de destellos
desconcertante luminiscencia
aún para el más avispado navegante

Por todo el panorama había tanto movimiento
como danza de un ritual con espejos
Tanto brillar vigorozo
podría ser un escondite para los temblores
para el ansia
mimetizados entre el resplandor y el oleaje

A aquella hora del día
nadie caminaba aquellas playas
era como un remanso perfecto y solitario
para disfrutar largo tiempo
al escribir pacíficamente sobre la arena
canciones para los amantes desvelado
aquellos seres agónicos
seres sensibles y temerosos
que deambulan por la noche
y siente que sus pasos nunca llegarán
al destino que su corazón marca
con acompasado latir y sentimiento
aquellos que como ángeles caídos
no sueñan
deambulan entre las sombras de la noche
cantando lo que su frágil corazón
esconde entre latidos vivos
Seres que al amanecer
caminan descalzos por la fría playa
descifrando poemas en arenas borrosas
humedecidas por la marea crecida
Muerden las letras con su voz entrecortada
desayunan poesía 
entre las huellas de pájaros ávidos de alimento
entre aleteos desesperados
y rutas trazadas por pequeños crustáceos
Ellos
los noctámbulos
coleccionan lo que saben
les ayudará a perpetuar su honda pasión
su penar errante

Como gatos bocarriba

2 XI 2012. Pasos hacia la luz

Imagen: Katarzyna Szczodrowska

Letras: yguana rosa